martes, 25 de septiembre de 2007

miércoles, 19 de septiembre de 2007

SALUD, SALUD!


El día en la oficina había transcurrido sin novedad, ZZ trabajando frente a la computadora, de vez en cuando hablaba con Alex, el muchacho multifunciones, o con Isabel (la secretaria), avanzando lo que había empezado el día anterior, era un día además tranquilo, así pasó toda la mañana hasta que llegó las 2 p.m., tocan el timbre, ZZ escuchó unos pasos que bajan las escaleras y se dirigen hacia la puerta, la abren, oyó voces (holas!), él parecía saber quien era, se abrió la puerta del lugar donde trabajaban (antes era un garaje), entró Adriana, igual que todos los días, aunque ZZ se preguntaba por qué ella nunca tocaba la ventana para le abrieran la puerta mas rápido, sería por darle la contra?, entró a la oficina vestida con una blusa, un jean a la cadera acampanado, sus zapatos con plataforma ancha y una chompa larga de hilo…

ZZ: Hola Adriana!

Adriana: Hola ZZ!


…ella se sienta en su silla,…

ZZ: Has venido primaveral.

…Adriana sonríe con el comentario, enciende la computadora, arregla los papeles del día anterior y sobre los que tenía que continuar trabajando…

ZZ: Y qué hiciste ayer?

Adriana: Nada.

ZZ: No salieron?

Adriana: Nos quedamos en mi casa viendo t.v.


…continuaron trabajando, cada uno en lo suyo…

Adriana: y tú?, viste a la mujercita? (sonríe)

ZZ: A Paola?, sí!

Adriana: Y?


ZZ: Hablamos, siempre me trata con cariño,…y yo también por supuesto.

Adriana: Estuvieron en su casa?

ZZ: No, nos encontramos en el C.C. Caminos del Inca, estuvimos ahí un

rato y después fuimos a comer algo.

…después él vio su reloj, abrió su maletín, sacó un taper, se levantó y se fue a una mesa a comer, Adriana hizo lo mismo, como todos los días, se sentó a la mesa, mientras ZZ estaba mirando fijamente lo que estaba por comer, ella colocó una cajita de jugo frente a él y ….

ZZ: Buena Adriana!

… ella se ríe (como si hubiese hecho una travesura), ZZ agarra su cajita de jugo, la levanta y dice…

ZZ: Salud con jugo!

… Adriana levanta también la suya y las acercan…


ZZ: Chin, chin!


ZZ: Te provocó verme tomar todos los días, y te lo compraste.

Adriana: Lo vi en mi refri y lo traje.

ZZ: Querías sorprenderme.

Adriana: No.

ZZ: Pero lo has hecho.


… luego de comer continuaron con sus trabajos, que por esa época iban en aumento, por lo que estaban ocupados, siempre escuchando música en la radio (ZZ oía doble nueve, y ella, mmmm), hasta que Adriana levantó un poco la cabeza, se rascó el cuello y dijo con tono irónico…


Adriana: Siempre repiten las canciones en esa radio.

ZZ: Ya, está bien cámbialo.


… ella se levanta, se acercó a la radio (que era uno de esos equipos antiguos, que tienen tornamesa de dos velocidades, para discos de vinilo, con adaptador para los 45, toca-cassette y radio, y unas ranuras para colocar los cassettes con sus estuches, hechos con madera y metal, con los parlantes separados, también de madera, toda una reliquia), se quedó frente a la radio, buscando una estación, o tal vez una canción…

ZZ: Adriana, ya?

Adriana: Espera.


… hasta que se decidió por una, mas por cansancio que por convencimiento. Las horas pasaron, ya eran las 5:30 de la tarde, Adriana se levantó para ir al baño, momento que ZZ aprovechó para cambiar de radio. Cuando ella regresó no se dio cuenta o eso le pareció a él, continuaron en lo suyo, hasta que en la radio pusieron una canción de Nada Surf que ZZ siempre la tarareaba cada vez que la oía, pero esta vez era ella, mientras tenía la mirada fija en la pantalla acompañaba con su mmm... la canción, ZZ no dijo nada, no podía, no debía, solo escuchaba. Minutos más tarde entró Isabel (la secretaria)…

Isabel: ZZ, tienes que hacer estos cambios (le entrega un papel donde se
indican las modificaciones), los van a recoger a las siete.

ZZ: Ya, está bien.


… él empezó a hacer los cambios, pensó que no le llevaría demasiado tiempo, pero conforme avanzaba se dio cuenta que la cosa se complicaba, pues afectaba otras cosas; fue entonces que ella, Adriana dejó de hacer lo suyo y lo ayudó; ya eran diez para las seis, y ZZ le dijo…

ZZ: Adriana déjalo así, yo lo termino.

Adriana: Ahora lo acabo.


… sonó su celular, alguien la llamaba, la habían venido a recoger…

ZZ: Ya vinieron por ti?

Adriana: sí!

ZZ: Entonces déjalo ahí.

Adriana: No.

… pasaron varios minutos más, él volteó a verla (sentada con las piernas cruzadas, inclinada ligeramente hacia delante, veía la pantalla con los ojos entrecerrados, para agudizar su visión pues era corta de vista), estaba concentrada….

ZZ: Adriana, verdad yo lo termino.

Adriana: Ya me falta poco

ZZ: pero te está esperando hace rato.

Adriana: No importa, ya termino.


… ella acabó, cogió su bolso, se levantó…

Adriana: Chau!

ZZ: Chau y gracias señorita, ya ves somos un buen equipo, ojala siempre

fueras así!

Adriana: Oye, ya!


… ella abrió la puerta, y antes de salir apagó y prendió las luces varias veces, mientras lo veía con una sonrisa cachosa.

ZZ: Adriana, no seas palomilla!


--/11/03

lunes, 10 de septiembre de 2007


LOS RIDI-CULOS DE LAS CHICAS SUPERPODEROSAS
OST-RACISMO LINGÜÍSTICO




Hace unos días hubo una noticia que causó revuelo, más por sus connotaciones que por el hecho en sí, y es que tal suceso fue resultado de otros desatinos, me refiero al intercambio verbal de dos congresistas, y es que las raíces de la discusión se encuentran muy atrás en nuestro pasado, pero que se mantienen aún vigentes, de manera declarada o soterrada.
Todo empieza con el debate de una ley sobre la preservación de las lenguas aborígenes, tras lo cual se oyeron voces antes marginadas, excluidas, ignoradas; y que ahora que ostentan un poder, poder que las masas le otorgaron, y que como todo poder genera descontroles y desmesuras, así las razones sean justificadas; quizá la razón sea precisamente eso, años de ser silenciados, y que se manifiestan de manera hasta violenta, tal cual los reclamos de los grupos sindicalistas; tomar la ciudad, bloquear las carreteras, violentar el congreso, son gestos simbólicos que tienes su origen en la conquista, invadir a los invasores, pero no se dan cuenta que estos ya no existen, y si los hay, son muy pocos, como consecuencia del mestizaje, todo aquel rasgo se va diluyendo, mas la actitud sigue.
No mencionaré lo que dice la ley que originó todo este cúmulo de ridículos sucesos, solo comentaré que en él hay puntos absurdos por su imposibilidad de realizarse, otros más de los tantos desaciertos que se engendran en el congreso, y es que como siempre los peruanos transitan hacia los extremos; cuando lo que se debería buscar son mecanismos comunicativos para facilitar la integración.
Es más me pregunto cuanto lograrían los representantes de los grupos marginados si actuaran con menos apasionamiento y más sensatez, de seguro muchísimo.
Sobre esto, lo que dijo una de las congresistas implicadas, no deja tener razón, muchos de sus colegas también piensan lo mismo que ella, pero no se manifiestan por no ser calificados de discriminadores, la hipocresía política otra vez se pone de manifiesto, pero cómo descalificarlos por eso cuando es uno de los rasgos del peruano, del limeño, y es que confunden ser sensatos con ser discriminadores y racistas, y no asumir su rol como se debe.
Pero lo que sucedió al final, resultó ser el colofón que merecía, y no podía ser de otra manera, y hablo de la discusión entre las dos congresistas. Aquello parecía una pelea de callejón, parecía una secuencia, de las tantas del mismo calibre, de un programa de Laura Bozzo, mas el bochornoso acontecimiento no las descalifican por sí, pues peleas de congresista hay aquí y en muchas partes del mundo, sino por lo que subyace en él, y es nuevamente el tono racista y discriminatorio sale a la luz, pero a diferencia del programa mencionado, donde muestra a gente de barrios populares, y de la periferia en esos actos, fingidos o no, siendo también esta una expresión del racismo, pues solo esas personas pueden llegar al salvajismo público, la ridiculización, la imagen estereotipada de la gente pobre como producto de exportación.

Pero en el caso que comento, la relación pobre = escándalo se rompió, pues una de las implicadas resultó ser una mujer educada, con instrucción universitaria, de buena familia(entre comillas), intelectual; y es que aquí se suma a la discusión el ingrediente del poder del intelecto, es decir aquel que tiene un nivel intelectual mayor, ejerce ese poder sobre los demás, para subordinarlos; el intercambio verbal llegó a un nivel ofensivo, donde lo importante parecía no hablar tal o cual lengua, sino estudiarla (acaso no sabe la doctora que para las comunidades indígenas, sus lenguas son parte importante de sus propias identidades?, y entre líneas estaría diciendo que el problema no es siquiera la lengua, sería el que la habla, lo que es peor), no era que uno sea profesional (las dos lo son), sino que tan bueno se era ejerciendo, y es que ante estos argumentos mencionados por ambas señoras, había algo que tal vez era más contundente que es el reconocimiento público, sobre todo en esta época donde los medios de difusión tienen una importancia inusitada; cuanto hubiera querido la Bozzo, presentar una pelea así en su programa, aunque ella de vez en cuando hacía el papel de la doctor; y me imagino que tal escena debió dar la vuelta al mundo, y es que esos mismos medios que en su momento sirvieron de sustento a una de las congresistas, también puede significar el camino para su rechazo.

La imagen que mostró la televisión habría que analizarla desde otro punto de vista, más simbólico, la sra. Martha en primer plano, la sra. María en segundo plano, detrás de la primera pero en un nivel superior (tal vez parada en unas gradas), la sra. Martha hablándole y viéndola hacia atrás, por encima del hombro pero hacia arriba, la sra. María viéndola desde arriba, pero viendo la espalda de su “interlocutora” (pues nunca le daba la cara, tan solo cuando quería decirle algo); y es que todo esto refleja y resume la relación de Lima con las provincias (sobre todo de los andes).

domingo, 2 de septiembre de 2007

Y Un día todo CAMBIÓ

Habían pasado ya cuatro años desde que ella se fue a Madrid, y como sucede casi siempre el tiempo se encarga de cambiar las cosas, y en este caso no fue distinto, entre ZZ y Carolina, todo cambió; ella venía cada año pero solo en los dos primeros conservaban la intensidad guardada por la ausencia. Ella conoció a alguien allá, mientras él igual. Pero aún se escribían, comentando cada uno lo que sucedía con sus vidas. Mariana, la hermana de Carolina lo llamaba cada vez que había información de ella, sea una carta o una llamada ya confirmada (con fecha y hora), y ZZ estaba ahí siempre, parecía entonces conservar esa chispa dentro que lo entusiasmaba el saber de ella, y es que aún recordaba aquella primera conversación telefónica en casa de Mariana en Barranco, donde antes vivía Carolina, y donde tantas veces visitó, estando ella, tantas cosas, tantas vivencias en su casa; en un momento de esa conversación Carolina le dijo a ZZ…

Carolina: Me siento algo rara.

ZZ: Por qué?

Carolina: No se.

ZZ: Será que extrañas Lima?

Carolina: No!

ZZ: No extrañas Lima?

Carolina: Te extraño a ti!

…esa frase siempre estuvo dando vueltas en su cabeza durante mucho tiempo, y cada vez que ella venía le hacía sentir aquel sentimiento. Pero después de tantos años la situación era otra, los sentimientos también, ZZ pensaba que este año no se había comunicado mucho con ella, y es que ya no solo era la distancia entre ellos, sino la distancia que existía entre una comunicación y otra.
Hasta que un día tuvo que una reunión en la tarde en Barranco, eran las 5:37 de la tarde, una de esas tardes donde el viento tibio, el cielo amarillo ocre, anunciaban la despedida del verano; ZZ se animó a caminar un poco ya que no tenía apuro en llagar a algún lugar; caminaba por Av. Pedro de Osma, llegó al cruce con Bresciani, a su memoria volvió el pasado, el pasado con Carolina, caminando por estas calle tantas veces, tantas tardes talvez a esa misma hora, decidió andar por aquella calle, mientras avanzaba una sensación extraña lo invadía, llegó al final de la calle, había un malecón que al igual que antes estaba vacío, nunca había visto gente en aquel lugar, tal vez por eso siempre tuvieron la sensación de se de ellos; dobló a la derecha por donde continuaba el malecón, pensó llegar al final y doblar a la derecha, pero vio algo nuevo, algo que no pertenecía hasta ese momento, era una puerta de reja, avanzó, quiso abrirla, y nada, estaba cerrada, ZZ sintió amargura, insultó al alcalde, a los vecinos, a medio mundo; entonces pensó que aún podía ir por la calle paralela, entonces regresa por la misma calle, dobla por Pedro de Osma, hasta llegar a 28 de Julio, caminó por la calle, vio la puerta de reja de madera, la misma que de hace años ahora pintada de verde y que siempre estaba abierta, se paró frente a ella, la empujó para abrirla, y…..tampoco pudo hacerlo, estaba cerrada con llave, su amargura se convirtió en frustración, solo le quedó ver el lugar al que quería llegar a través de la reja, la plazuela, antes descuidada, sin pasto, los árboles secos, sin hojas, y las bancas rotas, donde tantas veces se sentaron los dos, tantas conversaciones, tantas chelas bebidas, tantas manifestaciones de afecto intercambiadas, con el mar y el ocaso de fondo hasta que oscurecía, aquel lugar era su refugio, su rincón, les pertenecía a ellos, no a los vecinos; y ahora con césped, los árboles con sus copas verdes, el piso limpio que por fin pudo darse cuenta de su diseño, ya sin bancas, con arbustos, flores que no dejaban ver el mar, ya no era lo mismo.
ZZ se quedó unos minutos mas, dio la vuelta y regresó por donde llegó resignado de no poder ingresar a la plazuela que antes le pertenecía y que ya no, con Carolina ausente, pensó como habría reaccionado y sonrió de imaginárselo.
Días después recibió una llamada de Mariana, le dijo que Carolina iba a llamar por teléfono mañana a las 7:00 de la noche y quería hablar especialmente con él; ZZ confirmó que iría, pero lo desconcertó lo de especialmente.
Al llegar ese día, habló con Carolina, Mariana lo dejó solo en la sala, y después de varios minutos de conversación él le preguntó…

ZZ: Dime Carola, Mariana me dijo que querías hablar conmigo especialmente.

Carolina: Sí, prefería decírtelo por teléfono que por escrito.

ZZ: Qué es lo que me quieres decir?, es algo grave?

Carolina: No, no es nada grave, no es malo, sino que es necesario que sea así, porque te quiero.

ZZ: Yo también a ti, pero qué es mujer?

Carolina: Lo quería decirte es que me voy a casar con Rafa!

ZZ: Que bueno, te felicito!, es el mismo de la foto que me mandaste?

Carolina: Sí!

ZZ: Me alegro mucho por ti!

…continuaron hablando un buen rato más. A los pocos días ZZ estuvo de nuevo en Barranco, fue por 28 de Julio, se paró frente a la reja de madera verde, y pensó que todo lo que pasó la semana pasada no fue casualidad, sino que tenía relación con la llamada de Carolina, y es que el no poder ingresar a la plazuela, era una señal, que anunciaba el futuro casamiento de ella, ella a la que dijo que vaya a estudiar a España, que esas oportunidades no se repiten en la vida, y que algún día futuro se volverían a reunir como antes, y que ya no será.

















--/09/98