AQUELLAS FÉMINAS

Hoy en la tarde estuve caminando por Larco, yendo hacia mi casa, después de una mañana agitada de chamba, crucé Benavides y vi a una chica, de pelo negro, largo, piel canela, y cuerpo delgado sinuoso, mi mirada no podía hacer otra cosa que acompañar su ondulante andar, hasta que se perdió entre la multitud; después cruce 28 de Julio y vi a una mujer, porque eso es lo que era, una mujer, de pelo negro, largo, algo ondulado, y blanca sin llegar a pálida, era de baja estatura, bien proporcionada, algo llenita, pero con unas increíbles tetas, que se movían suavemente cual cama de agua, mientras ella caminaba (como me hubiese gustado descansar sobre aquellos confortables pechos), obviamente todas las miradas masculinas estaban dirigidas hacia aquella mujer, hasta que también se alejó.


En Miraflores siempre hay algo que ver a cualquier hora